El suelo que pisamos nos inquieta. No nos fiamos de él. Hay quien hasta siente rechazo a tocarlo con las manos. En general, siempre hemos vivido de espaldas a aquellas cosas que se ocultan bajo la tierra y el mar, pero sobre todo bajo la tierra. Lugar de monstruos, de demonios. Hic sunt dracones. ¿Sabrías tú hacer un esquema sencillo de lo que hay bajo el suelo de tu casa?
No hay comentarios:
Publicar un comentario